
Irene Montero decía ayer que «el principal enemigo a batir» es la derecha. Está claro que las mujeres del centroderecha, con una excelente formación y una trayectoria profesional y política, son menos mujeres que las amazonas de Podemos que sí saben lo que hay que hacer para avanzar en el terreno de la igualdad. Es un insulto a la inteligencia. Millones de mujeres de toda clase y condición votan al centroderecha, porque saben que los avances sociales y económicos se logran desde la centralidad y nunca con las políticas populistas de Podemos.